Cuando los sueños que poseía se tornan una pesadilla. Cuando ya no da ganas ni de despertar a pesar de que muchos anuncian el nuevo día. No estoy donde me indicaban aquellos pensamientos que tuve. Ese mundo lleno de vida, de esperanza, de diversos colores. En el que estoy no tiene color, su olor es nefasto. La basura huele mucho mejor. Se puede ver como Poe y Kafka dialogan en ese lugar debajo de una gran tormenta. Cucarachas, eso es lo que arrastran por las veredas recalcó Kafka. Ellas están debajo del árbol de manzanas que se hallaba al frente. Una a una iban soltándose las manzanas de las ramas. Esas caían encima de las pobres cucarachas que pasan dirigiéndose sin rumbo por la ciudad. Un gato negro le maullaba a Poe, después se postra en sus piernas. Poe comienza a sobar su cuerpo con delicadeza, mientras los otros gatos se acercan a los muertos en vida para que les prestasen sus ojos, ya que ellos nacieron sin ellos. Y el infaltable cuervo que entonan el himno fúnebre de ese país de los antisueños “NUNCA MÁS”.
Todo esto me hace acuerdo de que se me perdieron los sueños (están enterrados en alguna parte), solo ganas de dormir sin soñar.¿Dónde iré? Ahora que no tengo sueños más que estar postrado en mi cama, de ver como los días uno a uno pasan mientras mi cuerpo se carcoma antes de que se lo lleve el viento.
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